¿Quieres caer bien a todos- 7 consejos para conseguirlo.

 

A lo largo de mi vida de psicóloga, me he preguntado numerosas veces qué tienen ciertas personas que suelen caer bien a todos o casi todos. Esa típica persona que lo llena todo con su presencia y que cuando llega al grupo, se centra la atención en él o en ella. Pues bien, el secreto de esa persona es tener seguridad en sí misma y una buena autoestima, las cuales suelen ir acompañadas de unas excelentes habilidades sociales.

Esas habilidades sociales de las que te hablo y suelo trasmitir a mis pacientes, no es que tengas que nacer con ellas, sino que puedes aprenderlas a lo largo de la vida. Es cierto que desde la infancia, podemos observar a ciertos peques con un desparpajo que parece ser innato, una excelente capacidad para relacionarse y caer bien a niños y mayores. Sin embargo, en otros muchos casos, rasgos como el pesimismo, la timidez o la inseguridad, nos generan miedos que nos llevan o evitar ciertas situaciones sociales y así limitarnos la posibilidad de entrenar adecuadamente nuestras habilidades sociales.

Por todo ello, y dado que a algunas personas les cuesta mucho afrontar ciertas situaciones, os dejo 7 sencillos consejos, desde la psicologóa, que podéis empezar a practicar desde hoy.

1. Da una buena primera impresión: los estudios muestran que cuando conocemos a una persona, tardamos unos siete segundos en formarnos una primera impresión de ella, así que es muy importante que en este primer momento mostremos una postura relajada, una amplia sonrisa, o demos un buen apretón de manos si es el caso, pues estos gestos nos aseguran dar una buena primera impresión.

2No quieras ser el centro de atención de manera inadecuada: hay personas que, erróneamente, buscan conseguir la atención de los demás de manera poco habilidosa, como por ejemplo, haciendo bromas constantes o chistes malos, que lejos de acercarnos a la gente, en ocasiones, nos alejan. Debemos pensar que hay personas que toleran mal las bromas o que cierto tipo de humor de manera constante puede llegar a cansar. Las personas habilidosas socialmente no necesitan hacer esto. Ellos consiguen la atención de los demás, pero por ser como son y por la seguridad en sí mismas que transmiten.

3. Atento a tu lenguaje corporal: al final de todo momento social, lo que recordamos es cómo nos sentimos cuando pasamos un rato con tal persona, si el recuerdo es grato, se vuelve a por más. Para ello, debemos hacer sentir cómoda a la persona, con una postura corporal relajada y orientando nuestro cuerpo a ella.

4. Dirígete a la persona por su nombre: cuando te presenten a alguien, intenta recordar su nombre y, a lo largo de la conversación, dirígete a él de esta manera. Esto hará que la persona te perciba más cercano y amable.

5. No juzgues: cuando nos mostramos abiertos a escuchar a quien que nos expresa sus sentimientos o sus vivencias, hacemos más probable que vuelva a hacerlo en un futuro. Cuando mostramos una actitud  cerrada o juzgamos lo que nos cuenta, hacemos menos probable que esa persona se sienta cómoda abriéndose con nosotros. Piensa a quién le cuentas tú tus problemas o reflexiones,… seguro que es una persona ante la cual no te sientes juzgado. Aprende de ello y no cometas el error de juzgar.

6Sé auténtico: es verdad que a veces nos suceden cosas que hacen que nos cambie el humor. Esto puede llevar a que tratemos a las personas de manera inconsistente y que cuando piensen en acercarse a nosotros no sepan qué esperar, les desconcertamos. Para evitar esto, intentemos ser constantes en el trato a los demás, aunque hayamos tenido un mal día.

A pesar de ello, mostrar una actitud forzada, tampoco te ayudará, pues te aseguro que los demás lo notan. Conozco personas que, por no sentirse a gusto consigo mismos, se “inventan” un personaje que mostrar al entorno, ¡incluso a veces una vida! Esto te hará una persona poco auténtica, tensa y que a veces cae en la mentira, lo que los demás, te aseguro, acabarán notando.

7. Escucha a los demás: todos conocemos a la típica persona un poco egocéntrica que no escucha, que nos suelta su “monólogo” y se queda tan pancha. ¿Te sientes a gusto con ella? Posiblemente no mucho, porque nos gusta que nos escuchen, que se interesen por lo que tenemos que decir… es lógico. Aprende de ello y escucha a la persona que tienes enfrente.

Huelga decir que en los momentos sociales, el móvil debemos dejarlo de lado, pues se ha convertido en un pequeño intruso en medio de los grupos y es algo que merma las relaciones sociales cara a cara, las auténticas.

Puede que en principio, te resulte un poco complicado poner en práctica todo esto que describo, pero te aseguro que una vez aprendido, sale de manera automática, ya no necesitarás esforzarte. Sólo dejarás que fluya y disfrutarás de tus relaciones sociales.

Ya sabes, a ello y aprovecha el verano, ¡temporada estrella para relacionarnos!

 

Esmeralda Vázquez Conchas. Psicóloga y Directora del Centro de Psicología Integra.